Besos: Primer Beso

Besos con lengua: Primer Beso

Primer beso 

Uno nunca se encuentra preparado para el primer beso; no importa si eres demasiado pequeño o grande, la realidad es que en ese instante solo eres un ser ingenuo en un mundo nuevo y con un mundo nuevo que se te abre, precisamente, en su boca.

No importa cuánto intentemos buscar el momento, el lugar y la postura para nuestro beso, al final es obvio, lo mejor está a punto de suceder: TU PRIMER BESO. Esa sensación de dulzura y suavidad que al mismo tiempo es capaz de recorrerte todo el cuerpo, tanto física como espiritualmente. Es a partir de ahí donde ocurre tu primer indicio de sexualidad.

No es menos cierto que literalmente, ya te habías encontrado con un beso, aunque no lo hubieras visto así, y solo lo hubieras aceptado como un mimo más de tus padres o sencillamente como una señal de educación, por como solemos saludar y despedirnos de nuestros familiares y amigos desde que descubrimos lo que es socializar y aprendemos a desarrollarnos a partir de ello; pero nunca denominamos ni etiquetamos los besos como cuando te encuentras cara a cara con esa indecisión en donde desconoces porque te sientes nerviosa (o), pues sabes que aquí no van a intervenir tus padres al menos que después decidas contarles de tú gran hazaña a alguna amiga(o) de confianza por ser tú novata (o) en esos precisos momentos.

Cuando ocurre tu primer beso, cuando todos tus impulsos se han unido a la adrenalina, es entonces cuando descubres a través de otros labios que tu universo es bastante pequeño comparado con todo lo que se te ha aventado encima, pues ya descubres que tu diario se queda corto para tanto que contar y describir, ya tus juguetes tienen a quien celar, tus estudios tienen una razón para encontrarse un poco desvirtuados y tu mente creer que está cargada porque está llena de un montón de cosas inexplicables que te hacen ponerle un color diferente a tu vida y a todo lo que te rodea, ya tu inocencia comienza a emprender un camino descendente pues sabe que pronto apenas habitará en tu interior.

Ya has comenzado a conocerte con un beso y no pararás hasta encontrar con tus labios otras bocas, otros labios, otros besos. El primer beso es donde todo comienza, sin duda alguna.

"Siempre habrá mas que la primera vez, pero nada como aquel hechizo de probar tus pies mas alla de los permisos..."           - Buena Fe.